Un fuerte terremoto de magnitud 7.3 ha sacudido el norte de Chile, causando gran conmoción entre los habitantes de la región. El sismo tuvo su epicentro cerca de la ciudad de Arica, a una profundidad moderada que amplificó su impacto en la superficie. Las autoridades han informado sobre daños significativos en infraestructura y viviendas, aunque aún se están evaluando las cifras exactas de afectados.
El movimiento telúrico se sintió con gran intensidad en varias ciudades del norte chileno, generando escenas de pánico y evacuaciones en masa. Los servicios de emergencia se han desplegado rápidamente para asistir a la población, mientras que el gobierno ha activado todos los protocolos de respuesta ante desastres naturales. Las clases y actividades laborales fueron suspendidas en la región afectada, como medida preventiva para garantizar la seguridad de la ciudadanía.
Además del daño estructural, se reportan cortes de electricidad y agua potable en varias localidades. Las autoridades han hecho un llamado a la calma y a seguir las instrucciones de los equipos de rescate y protección civil. Se están estableciendo centros de acopio y refugios temporales para aquellos que han perdido sus hogares o no pueden regresar a sus viviendas debido a los daños.
Este sismo de 7.3 ha recordado a la población chilena la constante amenaza sísmica que enfrenta el país, ubicado en una de las zonas más activas del cinturón de fuego del Pacífico. La respuesta rápida y organizada de las autoridades y la comunidad refleja la preparación y resiliencia de una nación que ha aprendido a convivir con estos fenómenos naturales.
Enfoque Político - 2025